Todos tenemos objetivos o metas que queremos alcanzar. Algunos son a corto plazo y otros a largo plazo, en unos contamos con más recursos y en otros necesitamos colaboración. Durante este proceso surgen dudas, temores e inclusive frustración por no alcanzarlos, o lo que es peor una vez alcanzado.  ¿Cuál es la razón de que esto suceda?

Tal vez porque no estamos seguros de lo que queremos o de que necesidades buscamos satisfacer al conseguirlo. Cuando nos planteamos un objetivo es importante preguntarnos ¿qué es lo que quiero? ¿para qué lo quiero? ¿cómo me sentiré al alcanzarlo?

Los valores son el sistema operativo de nuestro cerebro y tienen un poder emocional increíble. Son los porque de los objetivos y son lo que realmente no importa.

Hay personas aparentemente exitosas con una profesión reconocida y con talento pero que a la vez no están satisfechas porque lo que hacen no es acorde con sus valores.

¿Tus objetivos lo son?

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *